Existen muy pocas referencias de existencia de esta entidad bancaria, la primera que se estableció en Carhué. Las primeras referencias del BANCO ESPAÑOL DEL RIO DE LA PLATA sucursal Adolfo Alsina (Carhué) corresponden a las actas de la Sociedad Española de Socorros Mutuos cuando, en recambio de autoridades, se deja constancia de dinero existente en una cuenta de este banco, con fecha Julio de 1902. Por ello es que probablemente se haya abierto poco antes, entre los años 1901 y 1902. Al parecer no tuvo edificio propio y la sucursal que se grafica en una publicación de 1924, estaba ubicada en calle San Martín al 900, frente a la plaza (ex local de Casa Terracina).
La evolución comercial de estos incipientes poblados, que hasta hacía poco habían sido territorio indígena, era constante y pronto se evidenció la necesidad de contar con entidades bancarias para el crédito, transacciones, etc. El primer antecedente de un pedido para contar con un banco corresponde a 1889 cuando un grupo de vecinos comerciantes y ganaderos envía nota al Presidente del Banco de la Nación, por intermedio del mismo fundador, Tte. Gral Nicolás Levalle.
El Banco Español se mantuvo como única entidad bancaria hasta 1907 en que se abrió la sucursal del Banco de la Provincia de Buenos Aires, por entonces en calle Mitre, edificio lindero a la actual ubicación.
La presencia del Banco Español del Río de la Plata en Carhué se cerró alrededor de 1926[i] aproximadamente, cuando se decide dejar de operar en la localidad. Poco tiempo después, en 1929 abría la sucursal Banco de la Nación Argentina, siendo por muchos años las dos entidades existentes.
El paso del tiempo poco a poco fue borrando de la memoria colectiva la presencia de esta importante entidad bancaria.
Los datos sobre el accionar del banco son exiguos y sólo se puede rastrear información en algunas antiguas guías comerciales o ferroviarias. Así hallamos que en 1913 era gerente del banco Español Martín N. Villafañe[ii], por ejemplo. Un expediente del Juzgado de paz también sita a Domingo Marche como empleado.[iii]
Hurgando en este fondo documental, una escritura poder de la escribanía de José Claro deja establecido que a partir del 29 de diciembre de 1913 se desempeñaría como gerente don Pedro Augusto Bavera y contador Francisco E. L. Amore[iv]. Ambos creyeron en el futuro económico de Epecuén y fueron propietarios de tierras en las cercanías del pueblo fundado por Vatteone: Bavera fue propietario de la Chacra Nº 52 -frente a la de Minas Epecuen- y D´Amore de la Nro 51. Éste último, en 1920 compró tierras de esa chacra a Manuel Álvarez Pérez, las subdividió en 50 manzanas para ofrecer lotes en venta que llamó “Pueblo Epecuén”. El intento casi no tuvo casi compradores, poseía una plaza central llamada PLAZA CARHUE en la Manzana 56, dejando destinadas las Mz A, B, C y D (96,76,36,17) como espacios públicos. Sus calles estaban bautizadas como: Buenos Aires, San Martín, Rivadavia, La Plata, Bahía Blanca, Guaminí, Córdoba, Argentina, España, Italia y Carhué, cruzadas por Avda de los Balnearios, Roca, Hebe, Hernán, 25 de mayo e Independencia. Hacia 1952 todas las manzanas eran adquiridas por Juan Falcón, quien a partir de 1963 las ofrecía en venta como un único lote, siendo adquiridas por la flia Fuentes de Epecuén.[v]
Hacia 1924 el banco tenía como gerente a J. I. Deluchi y a Raúl M. De Orta como contador[vi].
Internet nos brinda la posibilidad de conocer un poco más de la familia Bavera, que por varios años estuvo afincada en Carhué : “Mi abuelo, Pedro Augusto Bavera (1878-1944), fue gerente del Banco Español de Carhué y poseía un campo, El Refugio, en sus cercanías, además de una chacra en Epecuén. En 1920, ya radicado en Buenos Aires, fundó en el Mercado Nacional de Haciendas de Liniers la casa consignataria Bavera y Cia, que más adelante, con la incorporación de mi padre, Guillermo Juan José Bavera (1905-1992), cambió su denominación por la de Pedro A. Bavera e Hijo. Mi padre la siguió hasta 1970.”[vii]
El establecimiento “El Refugio” estaba cercano al paraje “La Porota” y de la escuela Nº 27, dado que don Pedro Bavera cedió una hectárea y allí se edificó el actual edificio.
Según datos familiares tomados de la publicación citada al final de este trabajo, Don Pedro Augusto Bavera fue poseedor en 1918 del primer Ford (a bigote) con arranque eléctrico. En Carhué formó parte desde 1920 de la “Sociedad Anónima BALNEARIO Y TERMAS DE EPECUEN S.A.” la que reunía a hacendados, comerciantes, hoteleros y profesionales como Carballo, Altube, Insúa, Herrera Murillo, Arriaga, Blasco, Martín, Alves, Bruni, Alcetegaray, Echepare, Lorenzo y Felix Piazza, Torroba, Erize, Razquin, Molina, Fasulo, Beunza hnos, Torres, Rodriguez, Cabello, Manoni Ponti y Enrico, entre otros. En los libros de actas del HCD de 1948 surge un pedido de Guillermo Bavera quien solicitaba el corrimiento del alambrado de la Chacra 52 de Epecuén, frente al barrio Parque Minas Epecuén.
En el Álbum Radical de 1924, gran publicación con contenido histórico, político y de sociedad, contiene una foto del edificio en donde funcionaba entonces el Banco Español del Rio de la Plata. Si bien no dice dirección ni otro dato, buscando y cotejando los edificios de las calles céntricas ubicamos al banco Español en el local de San Martín al 950, el que luego fuera reciclado para contener el comercio de “Strauss y Terracina”, lindero a “Casa Torroba”, hoy “Cooperativa Agrícola Ganadera”.
Sin embargo, en los registros catastrales figura como propiedad de dicho banco, hasta 1920, el local de la cortada de la plaza que fuera conocido mucho tiempo como “Confitería La Armonía”, hoy “Look Regalos”. Cabe la posibilidad de que entre 1902 y 1920 haya sido esa la sede del Banco Español del Rio de la Plata, siendo vendida a Santos Blasco en dicha fecha, quien entre 1920 y 1931 tuvo “La Casa del Pueblo”, en el rubro tienda. En 1931 se trasladaba allí la “Confitería La Armonía” hasta entrados los años 70.
Con sede en Buenos Aires y Madrid el banco fue fundado el 2 de enero de 1887, abriendo sus puertas en un local de la calle Piedad (hoy Bartolomé Mitre) de la Ciudad de Buenos Aires.
En publicidad tomada del semanario El Progreso de Carhué del año 1913 se reseña el panorama de la entidad, en pleno crecimiento: “Exterior: Barcelona, Bilbao, Coruña, Génova, Hamburgo, Londres, Madrid, Montevideo, París, Rio de Janeiro, Santos, Sao Pablo, San Sebastian, Digo, Valencia, con una agencia en el Puerto de El Grao. Interior: Adolfo Alsina, Bahía Blanca, Bartolomé Bavio, Bragado, Balcarce, Bartolomé Mitre, Carlos Casares, Concordia, Córdoba, Coronel Suárez, Dolores, Gualeguaychú, La Plata, Lincoln, Lujan, Lomas de Zamora, Mar del Plata, Mendoza, Mercedes (Bs. As.), Mercedes (San Luis), 9 de julio, Pehuajó, Pergamino, Posadas, Rosario, Rafaela, Rivadavia, Salliqueló, Salta, San Juan, San Nicolás, San Rafael, Santa Fe, Santiago del Estero, San Pedro, San Luis, Tres Arroyos, Tucumán y Villaguay.
Agencias en capital:
1- Pueyrredón 185
2- Almirante Brown 1422
3- Vieytes 2000
4- Cabildo 2091
5- Santa Fe 1999
6- Corrientes 3200
7- Entre Ríos 785
8- Rivadavia 6902
9- Triunvirato 802
10- Bernardo de Irigoyen 1399
11- Caseros 2965
12- Charcas 1357
13- Bolívar 309
14- Belgrano 2469
15- Bernardo de Irigoyen 179
16- Reconquista esq. Santa Fe
Corresponsales directos en Europa, Asia, África, América del Norte y del Sur.”
Otras publicidades del mismo semanario de 1917 denotan una importante reducción de sucursales en el interior del país y en Capital Federal. En 1913 contabilizamos 38 sucursales; en 1917 32 sucursales y en 1921 26 entidades en el interior del país. Por su parte en Capital ya eran 10 sucursales contra 16 nombradas en 1913.
Según Wikipedia, “A pesar de haber abierto sus operaciones en la burbuja financiera que vivió Argentina entre 1886 y 1890, acaparó la atención del público por su capacidad para sortear la crisis de 1890. En contraste con las dificultades que se extendían entre los establecimientos bancarios en aquella época, incluyendo el cierre definitivo del Banco Nacional y el del Banco Provincia por 15 años. Entre mayo y junio de 1891 se observó el cierre de casi todos los establecimientos bancarios, siendo la excepción el Banco de Londres y Río de la Plata. El éxito del banco radicó principalmente en el mantenimiento de un alto porcentaje de reservas en efectivo, superior al 50% de los depósitos, además de “haber mantenido una cartera de créditos fácilmente movilizables".
“En 1905 inauguró su casa central en la esquina de las calles Reconquista y Cangallo (hoy Tte. Gral. Perón) de Buenos Aires, obra del ingeniero y arquitecto argentino graduado en París Carlos Agote. Alrededor de ese mismo año, se inauguraron varias sedes más del banco en diferentes ciudades del país, las cuales eran réplicas de la sede de Buenos Aires con mínimos cambios, todas diseñadas por Agote. Por ejemplo, la de la esquina de las calles Gral. José de San Martín y Maipú de la ciudad de San Miguel de Tucumán (hoy Paseo Español), la de la esquina de Av. Colón y Chiclana de la ciudad de Bahía Blanca (actual Bolsa de Comercio de Bahía Blanca), la de la Av. España y Necochea de la ciudad de Mendoza, la de la ciudad de Córdoba, etc. Allí permanecieron operando hasta que el Banco Español fue comprado en 1988 por los Bancos Francés, Galicia, del Buen Ayre, Mercantil, y del Río de la Plata, posteriormente Banco Río. El Banco Galicia tiempo después compró algunas de las sedes del Banco Español del Río de la Plata, y en 2001 demolió el edificio de la casa matriz (el de Buenos Aires), pese a su valor patrimonial, y construyó en ese mismo terreno la Torre Galicia. Cabe aclarar que antes de su venta a los cinco bancos mencionados, el BERP había sido comprado por la entidad tucumana, Banco Comercial del Norte para llamarse en un futuro Banco Comercial Español, pero en el transcurso del trámite de la transferencia, hubo un cambio de regla en la corte de la suprema que no permitió a sus dueños hacer que el proyecto prosperara. Posteriormente, el banco Río pasó a ser Banco Santander Río.
La sucursal en Madrid, conocida como Edificio de las Cariátides, fue inaugurada en 29 de abril de 1918. El primer proyecto, encargado a Antonio Palacios y a su amigo y socio Joaquín Otamendi, fue realizado en 1910, el mismo año que dio comienzo la construcción de la Gran Vía.
En 1947 se transformó en el Banco Central, con la fusión de ambas entidades. Luego, en 1991, se fusionó con el Banco Hispano Americano para formar el Banco Central Hispano. A su vez, en 1999, el BCH se fusionó con el Banco Santander para formar el BSCH, que más tarde se denominó simplemente Grupo Santander.”
[i] En las actas de la sociedad española se hace referencia a depósitos en la entidad hasta 1923.
[ii] 1913. Guia Kraft
[iii] JP Civil 1913. Ord 17. Martín N. Villafañe c/ Santiago Audicio Embargo Preventivo.
[iv] JP Civil 1914. Ord 17. Martín N. Villafañe c/ Raimundo Muller. Embargo Preventivo.
[v] Partarrieu, Gastón. EPECUEN, HISTORIAS DE SUS AÑOS DORADOS 1821-1956. La Imprenta. Carhue. 2021.
[vi] 1924. Álbum Radical.
[vii] https://www.produccion-animal.com.ar/temas_historia/125-LAGO_EPECUEN.pdf
El siguiente es un listado -aún en armado- sobre escritores oriundos o radicados en el distrito de Adolfo Alsina con libros publicados. Se hallan ordenados alfabeticamente.
El siguiente material fue realizado por el Museo como marco histórico teórico para un proyecto de Museo de la Colonización Judía en Rivera, iniciado en 2013.
“Pero algo no andaba bien. Los ecos del pogrom de Kishinew despertaban una sorda inquietud aún... seguir leyendo
La estación Canónigo Gorriti ubicada en el Cuartel 8º de Adolfo Alsina fue librada al público sobre abril de 1907. Si buen nunca se conformó un poblado, se lotearon dos manzanas en donde se levantaron algunas pocas construcciones para comercios así como para viviendas particulares. También en ellas se habilitó la escuela nº 14. Se puede decir que su apogeo se dio en los años 50 y 60.... seguir leyendo